La lucha contra el Alzheimer entra en una nueva era: detección precoz, prevención y medicina personalizada

Durante la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer (AAIC 2025), realizada en Toronto, expertos destacaron avances que marcan un punto de inflexión en la investigación del Alzheimer, la forma más común de demencia, que afecta a 55 millones de personas en el mundo, una cifra que podría duplicarse para 2050.

El evento reunió a referentes globales en neurología, quienes coincidieron en que la ciencia está entrando en una nueva etapa centrada en la detección temprana, la prevención activa y la medicina personalizada.

Principales avances presentados:

  1. Biomarcadores en sangre más precisos
    Se consolidó el uso de biomarcadores como p-Tau217 y NfL que permiten detectar el Alzheimer años antes de los síntomas clínicos, de forma menos invasiva y más accesible que las pruebas tradicionales.
  2. Vínculo intestino-cerebro
    Nuevos estudios mostraron cómo la microbiota intestinal influye en el riesgo de Alzheimer, abriendo la puerta a terapias que actúan desde el sistema digestivo.
  3. Prevención personalizada: estudio U.S. POINTER
    Este ensayo clínico en EE. UU. demostró que una combinación de actividad física, dieta, control vascular y estimulación cognitiva mejora la salud cerebral en adultos mayores en riesgo.
  4. Fibrinógeno como nuevo biomarcador
    Se identificó al fibrinógeno como posible marcador temprano de deterioro cognitivo y potencial blanco terapéutico.
  5. Diversidad diagnóstica del Alzheimer
    Se avanzó en la clasificación de subtipos atípicos de Alzheimer, lo que permitirá tratamientos más específicos.

Además, se destacó la investigación en poblaciones con Síndrome de Down, que ayuda a comprender la base genética de la enfermedad.

Prevención: la clave está en el estilo de vida

Aunque el Alzheimer aún no tiene cura, hasta el 45% de los casos podría prevenirse actuando sobre 14 factores de riesgo modificables a lo largo de la vida, como el control de la presión arterial, el tratamiento de la pérdida auditiva, el ejercicio físico, la estimulación cognitiva, el sueño de calidad y evitar el aislamiento social.

Los expertos enfatizaron que el Alzheimer comienza mucho antes de que aparezcan los síntomas, por lo que las decisiones cotidianas son fundamentales en su prevención.